El tiburón tigre (Galeocerdo cuvier) es una especie propia de aguas cálidas y templadas de todo el planeta. Está presente en las Islas Canarias y hay una pequeña población en el Golfo de Cádiz. Alcanza los 5 m de longitud y los 1.500 Kg de peso, aunque se conoce el dato de un ejemplar de 7,3 m. Puede llegar a rivalizar en tamaño con el tiburón blanco, teniendo un cuerpo robusto, aunque no tanto como el de este y no soliendo superar los 800 Kg. Recibe su nombre tanto por su ferocidad, como por las líneas que presenta en la espalda.
Es poseedor de dientes más pequeños que los del gran blanco pero su cabeza es más ancha y posee unos músculos extremadamente poderosos que hacen que el tiburón tigre sea considerado como la hiena de los mares, teniendo la más potente mordida de todos los peces vivientes. Tiene una dieta enormemente variada y es el cubo de basura de los mares, comiéndoselo todo: otros tiburones, rayas, muchas tortugas marinas, aves y serpientes marinas, carroñas, ballenas heridas, delfines, marsopas y leones marinos. Se sabe que los delfines suelen evitar las aguas donde viven los tiburones tigre.
El hecho de ser tan una especie con una dieta tan variada lo convierte también en un peligro para los seres humanos, porque está dispuesto a probarlo todo y es mucho menos escrupuloso que el tiburón blanco. Acostumbra a atacar a nadadores, submarinistas y hasta a pequeñas embarcaciones. Es la tercera especie de tiburón más peligrosa para el ser humano tras el tiburón toro y el blanco. Entre las tres protagonizan la inmensa mayoría de ataques por tiburones.
A continuación algunos vídeos del tiburón tigre, con escenas de caza:
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El irascible diablo de Tasmania.
El diablo o demonio de Tasmania (Sarcophilus harrisii) es un marsupial de la familia de los dasiuros y el mayor marsupial carnívoro existente en la actualidad, después de la extinción del lobo marsupial en 1936. Se encuentra presente en la isla de Tasmania y en el sur de Australia. Tiene el tamaño de un perro pequeño, pesando entre 4 y 12 Kg y llegando a los 110 cm de longitud. Su desproporcionada fuerza, su constitución, muy musculosa y con una gran cabeza, así como el ser poseedor de la mayor potencia de mordida en relación con el peso del reino animal, unido a su carácter sumamente irascible hacen de él un animal pequeño pero temible, con un fuerte y molesto grito. Tiene la fuerza en la mandíbula de un perro cuatro veces más pesado que él y su mandíbula se abre de forma desmesurada (75 - 80º) en comparación con los carnívoros placentados.
Su alimentación es en gran medida carroñera (devorando incluso los huesos - incluyendo el cráneo - y la piel) pero también captura mamíferos medianos como pequeños canguros, roedores, reptiles y hasta ovejas. Se sabe que es capaz de controlar las poblaciones del introducido zorro rojo (vulpes vulpes).
En libertad solo alcanza los 6 años de edad. Es una especie seriamente amenazada y la aparición en 1990 de un tumor facial que ocasiona grandes mortandades ha diezmado su ya maltrecha población. Se corre el riesgo de que acabe siendo, únicamente, un personaje de dibujos animados.
A continuación algunos vídeos:
Águila harpía. La rapaz más poderosa.
El águila harpía o arpía (Harpia harpyja) es la más poderosa rapaz existente, la mayor de América y una de las águilas más grandes del mundo. Las dimensiones medias de una hembra son de 1 m de largo, 2 m de envergadura y 9 Kg de peso, pudiendo llegar a alcanzar los 10 Kg. El macho no suele superar los 8 Kg. Sólo el águila pitecófaga de Filipinas (Pithecophaga jefferyi) la supera en envergadura pero la harpía es más robusta. Otra especie de hábitos y morfología similar es el águila coronada africana (Pyopsis novaeguineae). Las tres especies tienen una dieta basada en buena parte en monos y las tres presentan cresta.
Es una verdadera superpredadora de las selvas donde habita, distribuyéndose desde el sur de México hasta el norte de Argentina. Su morfología está plenamente adaptada al hábitat forestal en el que vive, teniendo las alas relativamente cortas y anchas para desplazarse entre los árboles y una cola larga que le permite giros bruscos. Aunque todo en este ave es espectacular lo más llamativo, sin duda son sus enormes garras, tan grandes como una mano humana y sin embargo dotadas con unos dedos proporcionalmente cortos y muy gruesos que terminan en unas letales uñas, tan grandes como las de un oso grizzly pero mucho más curvadas y afiladas. Sus tarsos son también poderosísimos. Todo ello le otorga una descomunal potencia prensora al servicio de la captura de mamíferos, frecuentemente monos. El hecho de que las águilas más poderosamente armadas estén especializadas en la captura de monos puede explicarse en lo peligroso que resulta para un cazador alado la captura de especies dotadas de largos brazos y manos, que antes de morir pueden dañarlas seriamente el plumaje incapacitando al ave para el vuelo y condenándola a morir de hambre. Es por ello que estas águilas tienen la capacidad de matar a los monos de forma casi instantánea aplastándoles el cráneo hasta llegar a sacar los ojos de sus órbitas.
Además de monos, el águila harpía captura muchos perezosos, coatís, puercoespines, kinkajús, oposums, osos hormigueros, ciervos forestales, armadillos, pécaris, grandes guacamayos, iguanas y serpientes. Son un efectivo control de los monos capuchinos que acostumbran a destruir el nido de muchas aves. Puede levantar en vuelo presas del tamaño de la cría de un cerdo silvestre. Hay historias de ataques a niñós humanos sin demostrar y falsas con toda seguridad, pero que dan una idea del sentimiento que un águila tan poderosa inspira en las poblaciones locales. En Panamá es el ave nacional.
En la actualidad esta magnífica especie está gravemente amenazada y sus poblaciones siguen disminuyendo.
A continuación, algunos vídeos con escenas de caza:
A continuación, algunos vídeos con escenas de caza:
El dragón de Komodo.
El dragón de Komodo (varanus komodoensis) es la mayor especie de lagarto existente actualmente y pertenece a la familia de los varanos. Mide en término medio uno 2-3 m y pesa alrededor de 70 Kg las hembras y 90 Kg los machos. El ejemplar más grande que se conoce, midió 3,13 m y 166 Kg. Con tales dimensiones es el verdadero superpredador de las islas en las que vive al Sur de Indonesia. Son los últimos representantes de una población de varánidos gigantes que vivían en Indonesia y Australia.
El dragón de Komodo puede alcanzar velocidades de 20 Km/h, puede nadar grandes distancias y se encarama frecuentemente a los árboles durante su juventud.
El dragón tiene una alimentación frecuentemente carroñera pero también es capaz de abatir a mamíferos del tamaño de grandes cerdos, ciervos, cabras y búfalos de agua. Para ello utiliza un rápido ataque en el que agarra a su presa por la barriga o por el cuello. Le son de gran utilidad las bacterias que colonizan la saliva de su boca y que, tras morder a su presa, se introducen en el torrente sanguíneo de esta envenenando su sangre y ocasionándole una septicemia. También se ha descubierto recientemente que realmente son capaces de producir veneno en unas glándulas que poseen en la mandíbula inferior, lo que, sin duda, también colabora en la muerte de sus presas. Este veneno posee proteínas que inhiben la coagulación de la sangre, disminuyen la tensión arterial, ocasionan una parálisis muscular e hipotermia.
Aunque no son frecuentes se conocen ataques a humanos, el último ocurrido el 24 de marzo de 2009, en el que un pescador de la isla de Komodo fue muerto por dos dragones que lo abandonaron malherido. En 2007 también murió un niño de ocho años en Komodo desangrado tras el ataque de uno de estos animales.
El dragón de Komodo puede reproducirse por partenogénesis, lo que significa que las hembras pueden reproducirse sin necesidad de fecundación masculina.
A continuación algunos vídeos sobre el dragón de Komodo:
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