Araña de tela de embudo - la más venosa del planeta

La araña de tela de embudo (Atrax robustus), también conocida como tarántula de Sidney, es especie de araña más venenosa del mundo para los humanos. Pertenece a la familia de las mígales, arañas de gran tamaño, y vive en Australia.

Dotada de unos grandes y peligrosos quelíceros, muestra un comportamiento agresivo y los machos penetran con cierta frecuencia en las viviendas donde se hace muy peligrosa debido a su veneno, extremadamente tóxico en humanos y primates, pero relativamente débil para otros animales. Por fortuna, desde que fue desarrollado el antídoto para su veneno no se han vuelto a producir muertes por su picadura.

Recibe su nombre por la forma de las telas de araña que fabrica en el suelo.

A continuación un interesante vídeo sobre esta especie de araña, la más peligrosa de cuantas existen:

El irascible diablo de Tasmania.

El diablo o demonio de Tasmania (Sarcophilus harrisii) es un marsupial de la familia de los dasiuros y el mayor marsupial carnívoro existente en la actualidad, después de la extinción del lobo marsupial en 1936. Se encuentra presente en la isla de Tasmania y en el sur de Australia. Tiene el tamaño de un perro pequeño, pesando entre 4 y 12 Kg y llegando a los 110 cm de longitud. Su desproporcionada fuerza, su constitución, muy musculosa y con una gran cabeza, así como el ser poseedor de la mayor potencia de mordida en relación con el peso del reino animal, unido a su carácter sumamente irascible hacen de él un animal pequeño pero temible, con un fuerte y molesto grito. Tiene la fuerza en la mandíbula de un perro cuatro veces más pesado que él y su mandíbula se abre de forma desmesurada (75 - 80º) en comparación con los carnívoros placentados.

Su alimentación es en gran medida carroñera (devorando incluso los huesos - incluyendo el cráneo -  y la piel) pero también captura mamíferos medianos como pequeños canguros, roedores, reptiles y hasta ovejas. Se sabe que es capaz de controlar las poblaciones del introducido zorro rojo (vulpes vulpes).

En libertad solo alcanza los 6 años de edad. Es una especie seriamente amenazada y la aparición en 1990 de un tumor facial que ocasiona grandes mortandades ha diezmado su ya maltrecha población. Se corre el riesgo de que acabe siendo, únicamente, un personaje de dibujos animados.

A continuación algunos vídeos: